En los últimos años, América Latina se ha dedicado a construir y fortalecer instituciones multilaterales libres de ideologías de los Gobiernos para proteger valores comunes de la región como la solidaridad, la integración, el respeto a la soberanía y la no intervención, así como la búsqueda de soluciones pacíficas a las crisis, señaló Valente, participante del 24º encuentro anual del Foro de Sao Paulo.
Colombia en la OTAN: el caballo de Troya en América Latina https://t.co/WTQeeOimrg
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) June 5, 2018
Para la política brasileña, la adhesión de uno de los países del continente a una alianza militar como la OTAN es una amenaza para estos valores y, por lo tanto, a la paz en la región.
"Claro que nos preocupa. Creemos que es un retroceso y una amenaza para la paz en la región. Nuestra cultura política latinoamericana es totalmente ajena a este tipo de solución de conflictos", subrayó Valente.
"Lo consideramos como una injerencia estadounidense en la región, lo que es totalmente inaceptable desde nuestro punto de vista", añadió.
"Contra la adhesión de nuestros países a las alianzas militares que no tienen nada que ver con nuestra región, se organiza una campaña para oponerse a la destrucción de las instituciones multilaterales que lograron construir nuestros Gobiernos progresistas", concluyó.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, formalizó el 31 de mayo la adhesión de esa nación suramericana como socio global de la OTAN.
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Este bloque fue creado en 1949 por los países que firmaron el Tratado de Bruselas (Bélgica, Francia, Luxemburgo, Holanda y el Reino Unido) y Estados Unidos, Canadá, Dinamarca, Italia, Islandia, Noruega y Portugal.
Entre sus miembros figuran Grecia, Turquía, Alemania, España y la República Checa, entre otros.
