La presentación de los detalles sobre el nuevo cohete llamado Larga Marcha 9 tuvo lugar el 31 de mayo en la universidad de Tsinghua en Pekín, informa el medio Space News.
El portador superpesado tendrá un tamaño comparable al cohete estadounidense Saturn-5 y al Sistema de lanzamiento espacial que de momento está bajo desarrollo en el país norteamericano.
Se espera que tenga una altura de 93 metros, una masa de lanzamiento de más de 4.000 toneladas métricas y un empuje de aproximadamente 6.000 toneladas. Su etapa principal tendrá un ancho de 10 metros, mientras que cada uno de los cuatro propulsores adicionales tendrá cinco metros de ancho.
El nuevo cohete estará listo para un lanzamiento de prueba en 2030 y podrá subir una carga útil de 140 toneladas a la órbita terrestre baja, 50 a la órbita lunar y 44 toneladas a la órbita de transporte Tierra Marte.
Por lo cual, en términos de peso, Larga Marcha 9 estará justo entre el Sistema de lanzamiento espacial y BFR de SpaceX, cuyas masas constituyen 130 y 150 toneladas, respectivamente.
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La presentación de Larga Marcha 9 viene en el contexto de la cooperación sino-rusa en el ámbito espacial que se verá reforzada en la próxima década. Así, la agencia espacial china CNSA y la rusa Roscosmos ya firmaron un acuerdo de cooperación que cubre temas desde la exploración lunar hasta el monitoreo de basura espacial.
Anteriormente, el secretario general de CNSA, Tian Yulong, declaró a Sputnik, que China y Rusia intentan lograr un progreso en la fabricación conjunta de cohetes portadores superpesados.
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También se informó que los dos países cooperarán en la creación de su propia red de internet que necesitará cientos de satélites para proveer a todas las partes de la región con internet de gran velocidad.
