El techo de gasto fijado inicialmente por el anterior Gobierno ascendió a 119.834 millones, sin embargo, Montero aseguró que "habrá mayor margen fiscal para unos presupuestos expansivos y unas cuentas más sociales".
Este techo de gasto es el mayor desde 2014 y el objetivo es "atender subidas de pensiones y de sueldos de funcionarios", entre otras partidas.
La ministra también aseguró que este aumento "es compatible con no incrementar la deuda" y cumplir la reducción del objetivo de déficit que, según Montero, "ha aceptado la Comisión Europea".
El déficit en 2019 caerá al 1,8%, frente al 2,7 de este año y el 3,1 de 2017.
El Gobierno espera que este techo de gasto salga adelante, especialmente porque está autorizado por la Unión Europea.
"No tendría sentido rechazar lo que nos autorizan en la Unión Europea", aseguró la ministra.