"Estamos en la capacidad de hacerlo, somos los primeros productores de flores del país y Ecuador es el tercer país exportador de flores del mundo", declaró a la agencia EFE el alcalde del cantón Pedro Moncayo, Frank Gualsaqui.
Las flores que se utilizaron para decorar este insólito monumento provienen de 150 empresas florícolas ecuatorianas. Cientos de voluntarios locales de todas las edades participaron en la construcción de la pirámide.
"Diariamente tenemos de 200 a 300 personas dándonos su aporte", informó a los medios locales la diseñadora principal del proyecto, Rosa Cisneros.
La pirámide floral está inspirada en las pirámides de Cochasqui, consideradas un patrimonio natural y arqueológico de Ecuador.
