"Hicimos entrega de una propuesta de bases de entendimiento con los Estados Unidos y la administración Trump en los próximos años, a partir del 1 de diciembre de este año" en materia de migración, comercio, seguridad y desarrollo regional, dijo Ebrard en un mensaje a medios de comunicación.
"Fue un diálogo franco cordial y una conversación exitosa, que nos deja un optimismo razonable de que México va a encontrar bases de entendimiento con EEUU en los próximos años", dijo Ebrard, exalcalde de la Ciudad de México (2006-2011) y sucesor en ese cargo del triunfador en los comicios del 1 de julio (2000-2005).
López Obrador fue acompañado por su equipo responsable de las carteras de su próximo gabinete, y agradeció la visita a su sede, donde "se dio una ágil y cálida conversación, en la que no abordamos en detalles los temas, y no era la ocasión".
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Ebrard, en tanto, dijo que el equipo de transición no hará públicos los detalles de la propuesta hasta que el documento esté en manos del presidente Trump.
"Hasta ese momento daremos a conocer al pueblo de México su contenido", se excusó.
En materia de migración, la óptica es que en los próximos años "nadie en México tenga que emigrar por pobreza e inseguridad".
Para los temas de desarrollo y seguridad regional, el objetivo es impedir la necesidad de emigrar.
En ese punto mencionó "iniciativas de gran calado", por ejemplo, en la región el Istmo de Tehuantepec, que colinda con Centroamérica, donde el nuevo gobierno planea construir "una vía férrea para conectar la zona maya (…); y otro en la frontera norte (con EEUU) para crear una franja de 30 kilómetros de zona libre".
El proyecto de desarrollo plantea, asimismo, incluir a Centroamérica "y sostener un diálogo fructífero en materia de seguridad", con los países de la región, puntualizó el próximo canciller mexicano.
Invitación a toma de posesión sin hablar del muro
Ebrard dijo que Trump ya tiene la invitación para asistir a la toma de posesión de López Obrador, el 1 de diciembre próximo.
El Gobierno de Trump "ve con buenos ojos el respaldo de ese tamaño" recibido por el ganador de las elecciones, dijo Ebrard.
Sin embargo, en una sesión en la que solo aceptó cinco preguntas, el portavoz del equipo de transición dijo que, en el encuentro, no se habló del muro ni de las armas que entran a México de contrabando desde EEUU.
El equipo de López Obrador, un político de izquierda nacionalista que criticaba el TLCAN mientras estuvo en la oposición, anunció que se integrará a las negociaciones de las delegaciones de México, EEUU y Canadá, cuando se retomen tras la pausa del verano boreal.
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Además de los proyectos en las fronteras norte y sur, el próximo Gobierno informó a los funcionarios de la Casa Blanca de un plan para "plantar un millón de hectáreas de árboles en el sur" del país, en la zona fronteriza con Guatemala.
El equipo del presidente electo lo integran, además de Ebrard, el próximo titular de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, el de Hacienda, Carlos Urusúa, y los futuros negociadores del TLCAN, Jesús Seade Kuri y Graciela Márquez.
Pompeo y los funcionarios del Gobierno de Trump también se reunieron en privado con el presidente mexicano Enrique Peña Nieto en la residencia oficial de Los Pinos, donde el mandatario les ratificó el interés de continuar renegociando el TLCAN.
El presidente solicitó al secretario de Estado la rápida reunificación de las familias separadas en la frontera y destacó la necesidad de encontrar una alternativa permanente que dé Prioridad al bienestar y derechos de los menores.
Por la tarde, después de la cita con López Obrador, Pompeo se reúne con el canciller mexicano Luis Videgaray en la sede de la Secretaría de Relaciones Exteriores.