Los hechos se remontan al 22 de marzo de 2010, cuando el investigado, Fernando Villén, directivo de la Fundación Andaluza de Fomento y Empleo (FAFFE), dependiente de la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía (Gobierno autonómico), abonó un total de 14.737 euros por 15 facturas —con importes que oscilan desde los 310 hasta los 1.470 euros—, en el club Don Ángelo, un conocido local de alterne de Sevilla, y lo hizo utilizando una de las tarjetas de crédito de la entidad.
El portavoz del Gobierno andaluz, Juan Carlos Blanco, calificó el pasado martes de "lamentable, intolerable y patético" los hechos.
Debido a que los importes nunca se llegaron a registrar como gasto a cargo de la Faffe porque se repusieron, no hubo menoscabo de fondos públicos, explicó el portavoz, que también informó que el Gobierno andaluz entregó a la Justicia la contabilidad de la fundación durante todo el tiempo que estuvo en activo, así como material informático y contraseñas.
La Faffe fue creada en 2003 y disuelta en 2011 y las autoridades calculan que pudo llegar a gestionar alrededor de 300 millones de euros.
El escándalo fue denunciado por los conservadores del Partido Popular (PP) en Andalucía.