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En este ambiente, el tono del diario El País es más que reconciliador. De acuerdo al periódico, de lo que se trata, antes que nada, es "del deshielo que supone en sí misma la cita entre los máximos responsables de ambas Administraciones", la primera en dos años.
"El deshielo se materializa principalmente en que termina la ausencia de comunicación", precisa el medio, de cuya postura se desprende que el balance del encuentro entre Sánchez y Torra es netamente positivo. Principalmente, porque se avanzó en lo que supone beneficios mutuos, al tiempo que Madrid reafirmó su intransigencia ante los reclamos catalanes de autodeterminación.
Consultado sobre el tema por Radio Sputnik, el español José Luis Orella, doctor en Historia y Derecho, indicó que quizás el único resultado positivo del encuentro sea el que queden desmentidas las "rumorologías" que hablaban, por ejemplo, de la existencia de "negociaciones secretas".
Según el también profesor titular de la Universidad CEU San Pablo, la única manera de resolver el problema de los independentismos que torpedean a España es enfocarlo desde el punto de vista "de educación y de cultura", y no solamente desde el de "política".
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"Desde niños no se enseña a los españoles a convivir entre sí. O sea, sí se les enseña a que si un chico de otra raza, de otra religión viene del extranjero hay que tratarlo bien, y en eso somos una sociedad modélica. Hay una ausencia absoluta de noción de que toda la sociedad española es una, no somos 17 sociedades. Y, entonces, los nacionalismos han tenido décadas de formación de un espíritu nacional propio y, además, con una gran negatividad hacia el resto de España. Eso se está pagando ahora", indicó José Luis Orella.
