Los especialistas de la flota rusa han analizado los trabajos realizados por los marineros rusos y próximamente introducirán cambios en los programas de adiestramiento para los servicios de rescate. Asimismo, desarrollarán nuevos aparatos y drones que serán capaces de operar a grandes profundidades, informa el periódico ruso Izvestia.
"La flota rusa obtuvo una experiencia invalorable en la organización de operaciones de búsqueda realizadas a grandes profundidades en condiciones meteorológicas e hidrográficas adversas. Actualmente, ni una sola Armada del mundo, incluidas las de EEUU y Reino Unido, cuenta con esta experiencia", sostuvieron los expertos.
El comandante en jefe de la Armada rusa Vladímir Korolev declaró que esta experiencia será analizada y los resultados de este análisis darán la base para la teoría y práctica del arte marítimo-militar, así como se utilizarán en las investigaciones oceanográficas y en el mantenimiento de las operaciones de búsqueda y rescate.
Este buque del proyecto 22010 cuenta con equipos submarinos especiales que son capaces de sumergirse en el agua a profundidades de 6.000 metros. Durante su participación en la operación de búsqueda, el navío inspeccionó un área de más de 6.000 kilómetros cuadrados.
"Entendimos cuáles son las capacidades de los equipos que tenemos. Conocimos las dificultades que suelen surgir durante la implementación de estas operaciones. Estos conocimientos nos darán un empuje para crear equipos especiales. Además, tendremos que pensar en la necesidad de preparar a los especialistas para que controlen estos sistemas", aseguró el submarinista y veterano Vladímir Ashik.
El ARA San Juan se perdió en el mar el miércoles 15 de noviembre. Después de dos semanas de búsqueda, las autoridades argentinas dieron por muerta a toda la tripulación, constituida por 44 personas. El submarino sigue perdido.
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