La diplomática explicó que en las redes sociales se habían distribuido capturas de pantalla de la cuenta de Deutsche Welle en Twitter que se etiquetan como publicidad y que tienen enlaces a materiales negativos sobre Rusia.
"Es decir, una opinión absolutamente delirante e insultante se promociona por dinero. Y estamos hablando de un medio alemán que es apoyado por el Estado. Pero es a Rusia a quien se acusa de que sus medios están promoviendo algún tipo de publicidad política pagada", destacó Zajárova.
El Ministerio de Exteriores ruso apeló "a la empresa Deutsche Welle con una solicitud para confirmar o negar que dichos materiales ofensivos sean promovidos por ellos con una base comercial". No obstante, la respuesta aún no ha llegado.
"Hoy les enviaremos una solicitud oficial", aseguró la diplomática agregando que "vendría bien" tener una explicación también de Twitter sobre esta situación.