"En nombre del directorio del BID (…), es un honor ser el mayor socio de Bolivia, estamos orgullosos de lo que el BID ha hecho en este país", dijo Mauricio Silva, salvadoreño que representa a Centroamérica en el banco multilateral.
"Constatamos como base fundamental del desarrollo logros que son disminución de la pobreza y la desigualdad, en un clima de estabilidad macroeconómica y crecimiento económico. Eso es muy difícil y raro de encontrar en nuestro continente ahora, y lo tiene Bolivia. Esperamos que los bolivianos lo sepan apreciar", apuntó el visitante del BID.
La ministra de Planificación, Mariana Prado, dijo que en la reunión se pasó revista a los proyectos que financia actualmente el organismo y a una carpeta de planes para los próximos años.
"La clase media tiene nuevas expectativas y el BID ha comprometido acompañar proyectos en ciudades, de empleo y para jóvenes", dijo Prado.
Según un reporte del Banco Central con datos correspondientes al 30 de abril pasado, la entidad es acreedora de 27,7% del saldo de la deuda externa pública.
A esa fecha, el saldo de la deuda del Estado boliviano con el BID ascendía a 2.661 millones de dólares, en tanto que el saldo total de la deuda del país era de 9,614 millones de dólares.
El BID financia en Bolivia una gran variedad de proyectos que van desde saneamiento básico y educación a infraestructura vial, telecomunicaciones y transportes, como un segmento del teleférico de las ciudades de La Paz y El Alto.
El ministro de Obra Públicas, Milton Claros, dijo la semana pasada que el organismo ha expresado interés en ser parte del proyecto de corredor ferroviario bioceánico, que unirá a Brasil, Bolivia, Paraguay y Perú y demandará inversiones estimadas entre 7.000 y 10.000 millones de dólares.
El segundo acreedor multilateral de Bolivia es la Corporación Andina de Fomento, que tenía a fines de abril una participación de 24% en el saldo de la deuda externa pública del país sudamericano.