Un barco pesquero, con 180 migrantes ilegales a bordo, naufragó el 3 de junio a 16 millas náuticas de la ciudad portuaria tunecina de Sfax.
La guardia costera rescató con vida a 68 personas, entre ellas 60 tunecinos, y nacionales de otros países africanos.
En el recuento preliminar se contabilizaron 46 víctimas mortales, pero más tarde su número ascendió a 55.
Según la nota ministerial, los agentes "extrajeron del agua siete nuevos cadáveres aumentando hasta 55 el número de los cuerpos extraídos desde el domingo pasado [3 de junio]".