"Lo puedo describir en tres palabras: ritual político barato, no hay indicios de avance hacia algo más razonable para solventar problemas que crearon los mismos estadounidenses al acusarnos sin fundamento de violar el tratado y al desatender nuestros llamamientos de ocuparse profesionalmente de la situación con el Tratado INF", dijo Riabkov a los periodistas.
"Vamos a seguir los futuros pasos, pero no podemos descartar nada", afirmó.
Asimismo, indicó que las relaciones de Rusia y EEUU empeorarán si Washington impone nuevas sanciones contra Moscú.
"Es evidente que no solo no favorece el diálogo normal sobre problemas de estabilidad estratégica sino que lo impide abiertamente", explicó Riabkov.
La Casa Blanca anunció antes que estudiará la implementación de nuevas sanciones en contra de Rusia porque supuestamente el Kremlin infringió el Tratado INF (siglas en inglés de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio), que limita los misiles con un rango de acción de entre 500 y 5.500 kilómetros.
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El Tratado INF fue firmado el 8 de diciembre de 1987 durante la visita a Washington del líder soviético Mijaíl Gorbachov.