Como ha comentado el medio británico Daily Express, el uso de la limusina de producción rusa fue un "patriótico mensaje de autosuficiencia". La familia de automóviles ha adoptado un nuevo nombre y la limusina que transportaba al mandatario ruso llevaba una placa con el nombre Aurus. Se trata de una combinación de la palabra latina Aurum (que significa oro) y Rusia.
Se aceptarán pedidos de los vehículos Aurus a partir de agosto-septiembre de este año y, según mencionó el ministro de Industria y Comercio, Denís Mánturov, los precios de dichos vehículos comenzarán a partir de los 160.000 dólares. "Su precio seguramente será un 20% más bajo que el de Rolls-Royce y Bentley. No obstante, será más caro que el Mercedes de la clase S más barato", comentó el ministro.