Guerrilla del ELN y grupo armado EPL reanudan combates en región fronteriza con Venezuela

"Se reanudaron los combates en la vereda [aldea] Palo Cruz, en el municipio de Hacarí", confirmó a Sputnik el defensor regional de Ocaña, Nelson Arévalo.

Debido a la situación, un número aún no preciso de familias evalúa la posibilidad de salir de sus viviendas para buscar refugio en uno de los Espacios Humanitarios de Autoprotección creados a raíz de los combates entre ambas partes, que se desarrollan en la región del Catatumbo (en el departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela) desde hace 44 días.

"En el municipio de El Tarra la Administración Municipal no está atendiendo al público en el día de hoy [el 27 de abril], y en el comercio de Hacarí se observa una soledad total", indicó Arévalo, quien permanece en la zona como parte de una misión humanitaria que también acompaña la Iglesia Católica.

Según la emisora local Blu Radio, en la noche del 26 de abril "líderes sociales denunciaron que hombres armados llegaron hasta la vivienda de Orangel Galvis, integrante de la Asociación Campesina del Catatumbo, y (…) atacaron a bala la vivienda en donde se encontraba", aunque "el dirigente social resultó ileso".

Los enfrentamientos entre la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Ejército Popular de Liberación (EPL) se registran por el control territorial para la siembra de coca y las rutas del narcotráfico en el Catatumbo, lo que ha generado una crisis humanitaria de amplias dimensiones que ya deja más de 6.000 desplazados, según la Defensoría del Pueblo.

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El 23 de abril el EPL anunció una tregua de 72 horas (cumplidas desde el 24 de abril hasta el día 26) en respuesta a las peticiones hechas por las comunidades en una asamblea que se cumplió el domingo en El Tarra para que desmontara el paro armado que mantiene desde hace cerca de dos semanas, y mediante el cual ese grupo ha ordenado el confinamiento de las personas en sus viviendas por los combates con el ELN.

En un reciente comunicado el EPL negó que busque amedrentar a la población civil y violar el Derecho Internacional Humanitario y dijo que su objetivo es combatir al que ahora es su principal enemigo, la guerrilla del ELN.