La exhumación de los restos de los judíos asesinados en esta localidad polaca se efectuó en 2001, en el marco de una investigación iniciada por el IPN, pero fue cesada bajo presión de organizaciones judías que alegaban la incompatibilidad de ese procedimiento con las tradiciones religiosas.
"Es necesario completar la investigación cueste lo que cueste, cuando se tomó la decisión de cesarla, lo sucedido no fue aclarado y el asunto volverá a plantearse siempre, hasta que se tenga claridad", dijo Szwagrzyk.
Hasta finales del siglo XX se creía que fue el crimen de las tropas alemanas, pero las investigaciones posteriores, en particular, las del IPN, confirman la versión de que fueron unos habitantes de Jedwabne quienes mataron a los judíos.
El expresidente de Polonia, Aleksander Kwasniewski, presentó excusas oficiales al pueblo judío en 2001 por la masacre de Jedwabne.
Pero no todos en Polonia están de acuerdo con la versión oficial, en su tiempo el presidente del IPN, Jaroslaw Szarek, señaló a los alemanes como ejecutores de ese crimen, agregando que ellos usaron presión para obligar a un grupo de polacos a participar en la máquina de terror nazi.