"En el territorio de Afganistán se concentraron alrededor de 10.000 combatientes, la mayoría de ellos pertenecen a ISIS (grupo terrorista autodenominado Estado islámico, proscrito en Rusia y otros países)", dijo el comandante del Distrito Militar Central de Rusia, Alexandr Lapin.
"Cinco mil terroristas se encuentran en el norte de Afganistán", recalcó.
Lapin indicó que la llegada de los integrantes de distintas facciones radicales de Oriente Medio contribuye al fortalecimiento de Daesh en Asia Central.
Alertó que estos combatientes al retornar a sus países podrían crear células dormidas y cometer actos terroristas.
También subrayó que los radicales realizan el reclutamiento permanente de nuevos adeptos para enviarlos a Afganistán.
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El país centroasiático vive una situación de inestabilidad política, social y de seguridad a raíz de los ataques que lanzan el movimiento Talibán y, desde 2015, el grupo terrorista Daesh pese a la fuerte presencia militar de Estados Unidos y otros países de su órbita.
Según datos de la ONU, las hostilidades dejaron el año pasado casi 3.500 civiles muertos.