"Aquí está el presidente, aquí estamos nosotros y aquí nos quedaremos, para mostrar a Brasil que sabemos que tenemos que luchar para defender los derechos del pueblo, nuestra Constitución y la democracia", proclamó Hoffmann en un breve discurso ante miles de seguidores.
Moro había dado el plazo límite de las 17:00 hora local (20:00 GMT) para que Lula se presentara ante la Superintendencia de la Policía Federal en la sureña ciudad de Curitiba, pero el expresidente no se movió de la sede del sindicato.
"No hemos desobedecido ninguna orden judicial", subrayó Hoffmann, que añadió que el juez dio "la opción" de ir a Curitiba pero que Lula simplemente no la ejerció porque prefirió quedarse en un lugar público junto al pueblo.
Se esperaba que Lula pronunciase un discurso público a las 16 horas (19.00 GMT), pero no habló y Hoffmann dio a entender que tampoco lo hará próximamente, puesto que trasladó a los seguidores "gratitud" en su nombre.
El expresidente se encuentra en el tercer piso del edificio del Sindicato de Metalúrgicos y de vez en cuando se asoma a una ventana para saludar a sus seguidores.
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Lula fue condenado a 12 años y un mes de prisión por corrupción pasiva y blanqueo de dinero en el marco de la Operación Lava Jato.