"El aumento máximo es del 40%, el mínimo es del 28%, y el promedio es del 32%", comunicó el funcionario durante una rueda de prensa.
Con el objetivo de reducir los subsidios que el Estado aporta, el Gobierno celebró audiencias públicas entre el 20 y el 22 de febrero para determinar la nueva tarifa del gas, tal y como había ordenado la Corte Suprema.
"Alguien preguntará, ¿los de menor consumo aumenta más que los de mayor consumo? Es así, los de mayor consumo ya habían visto elevada su factura", afirmó el ministro.
Para los usuarios residenciales que consumen hasta 650 metros cúbicos de gas, la factura en promedio pasará de 314 pesos (15,7 dólares) a 440 pesos (22 dólares).
Las pequeñas y medianas empresas abonarán un 40% más desde el próximo 1 de abril, mientras que los comercios verán aumentado en un 32% en promedio sus facturas de gas, de acuerdo a Aranguren.
Lea más: Como Uruguay, Argentina tendrá su escuela sustentable
El ministro aseguró que "en los próximos cuatro años habrá un excedente en la producción de gas de 30 a 35 millones de metros cúbicos, [lo] que permitirá que bajen los precios que paga el consumidor".
Durante las gestiones del expresidente Néstor Kirchner (2003-2007) y la exmandataria Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), "el Gobierno dilapidó recursos fiscales para mantener los precios de gas artificialmente bajos", justificó Aranguren para explicar las subidas.
Para el próximo mes de octubre se prevé un nuevo aumento.
En noviembre de 2016, el Ejecutivo perdonó una deuda de 19.000 millones de pesos (1.250 millones de dólares por entonces) a las compañías distribuidoras de energía eléctrica, en compensación por el congelamiento de las tarifas que tuvieron durante la anterior gestión.
Entre las beneficiadas estaban Edenor y Edesur, las mayores distribuidoras de energía eléctrica del país.