Sergio Lazarovich decidió no solo cambiar su identidad de género en sus documentos, sino también su nombre. Ahora es Sergia. Si bien en Argentina este trámite es legal desde 2012, el expediente de esta contadora de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) de la ciudad de Salta suscitó polémica, pues para sus colegas de trabajo es una estratagema para alcanzar el retiro.
"Estupor, incredulidad y sinrazón porque un compañero de laburo se cambió el DNI a sexo femenino, cuando es bien sabido que es masculino, cuando es bien masculino y tiene pareja", decía el mensaje de uno de los colegas de Lazarovich leído en el programa de la emisora La Red del periodista Eduardo Feinmann.
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El periódico El Tribuno de Salta consultó a la misma Sergia sobre el tema. La protagonista de esta polémica, que se enteró a través de su hija de la alharaca alrededor de su cambio de identidad de género, negó que se tratase de una manera de burlar al sistema de jubilaciones.
"Lo hice porque estoy convencido, las motivaciones son mías y no tengo que explicarle nada a nadie", remarcó Lazarovich, vestida con un jean y una camiseta al momento de su entrevista.
Diputado chileno votará en contra de que adolescentes puedan cambiar identidad de género https://t.co/d9hC9HBEe8
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 21 de marzo de 2018
Desde el Registro Civil explicaron a El Tribuno que la ley de identidad de género habilita a cualquier persona a realizar el trámite, sin el requisito de que exista una intervención quirúrgica u hormonal, ni que la persona se vista con atuendos del género que elige, pues "no es el espíritu" de la normativa.
Sergia, en tanto, opinó sobre la polémica refiriéndose a la diferencia de edades para jubilarse: "Esto no habría sido un problema para nadie si todos se jubilarían a los 65 años".