Un total de 148.098 accionistas votaron a favor de la venta de Sea Launch, frente a los 30.456 que votaron en contra.
"El objetivo de la venta es evitar la quiebra del deudor [Sea Launch SA, actual propietario de la base espacial flotante] y garantizar que se realice la transacción de compraventa de los activos de la base Sea Launch que pertenecen al deudor", dice el texto.
En septiembre de 2016 S7 Space, una filial del grupo S7 especializada en el lanzamiento de naves espaciales con los cohetes portadores Zenit, y Sea Launch SA, empresa subsidiaria de RKK Energia, firmaron en México un contrato que supone la compra de la propiedad Sea Launch que se compone de la plataforma flotante Odyssey, el buque de mando Sea Launch Commander y equipos terrestres instalados en el puerto estadounidense de Long Beach.
Inicialmente estaba previsto que el contrato fuera sellado en el transcurso de seis meses, pero posteriormente los medios comunicaron que el cierre del contrato fue aplazado para finales del primer trimestre de 2018.