"Nadie cuestiona la legitimidad de las presidenciales (…) La gran mayoría de los observadores internacionales han dado una valoración positiva a la votación", dijo Volodin a la prensa.
Más de 1.500 observadores de 115 países siguieron el proceso electoral que registró una participación de más del 67% de los votantes.
"La votación transcurrió conforme a las leyes y los principios democráticos", remarcó Volodin.
"Se hicieron muchos halagos a Rusia, que fue capaz de organizar unas elecciones extremadamente democráticas y a la altura de las normas internacionales", subrayó el legislador.
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Un número sin precedentes de observadores internacionales asistieron a las elecciones presidenciales rusas, declaró Alexei Chepa, vicepresidente del comité de asuntos internacionales de la Duma de Estado de Rusia.
El jefe de la Misión Internacional de Observadores, Alexei Kochetkov, afirmó a su vez que la delegación china fue la más numerosa en comparación con los años anteriores, algo que vinculó a que las relaciones ruso-chinas adquieren un nivel completamente nuevo.
Según los últimos datos de la CEC, el actual presidente ruso, Vladímir Putin, gana las elecciones con el 76,67% de los votos tras el escrutinio del 99,75% de los sufragios.
