Abás formuló la acusación durante una reunión de la dirección palestina en Ramala.
Hamás, por su parte, acusa a Israel, o incluso a la Autoridad palestina, de estar detrás del atentado que se produjo poco después de que el convoy del primer ministro cruzara la frontera de Israel para entrar en la Franja.
Abás dijo que si el atentado hubiera tenido éxito, sus consecuencias habrían sido "desastrosas" y se habría declarado una guerra civil entre los palestinos.
También pidió a Hamás que entregue a la Autoridad palestina el poder que tomó en la Franja de Gaza en 2007.
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En el mismo encuentro con la dirección palestina, Abás calificó al embajador de Estados Unidos en Tel Aviv, David Friedman, de "hijo de perro".
Previamente, Friedman había acusado a Abás de no condenar los recientes ataques palestinos contra israelíes en los territorios ocupados.
