"Esto es producto de la intervención del Estado en el territorio, una reacción que han tenido estos grupos organizados, porque no es delincuencia común, es delincuencia organizada en torno a una presencia del Estado, una presencia que se traduce en una afectación de más de 6.000 millones de dólares a las estructuras delincuenciales, afectando seriamente su economía", indicó Navas en entrevista con Radio Sucesos.
El ministro insistió en que los atentados responden a que en los últimos meses las autoridades ecuatorianas han aumentado la incautación de precursores químicos —utilizados para producir estupefacientes—, de droga y además han desbaratado "las redes logísticas" de estas organizaciones criminales que estarían conformadas en su mayoría por disidentes de la exguerrilla colombiana FARC.
Según informó el secretario de Estado, también se ha detenido hasta el momento a 14 personas que "estarían directamente vinculadas con estas organizaciones", lo que también ha golpeado a esos grupos, consideró.
También aseguró que los ataques podrían repetirse pero enfatizó en que Ecuador mantendrá una respuesta firme y continuará combatiendo flagelos como el narcotráfico.
En ese sentido, aclaró que desde el pasado mes de diciembre el país fortaleció su presencia en la frontera, con un mayor desligue de uniformados de Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional para combatir "a estos grupos delictivos".
"El propio proceso dinámico de negociación de la paz en Colombia hace que no todas estas estructuras opten por una opción político-democrática, sino que se queden como grupos delictivos al servicio de organizaciones inclusive internacionales, no solo colombianas o ecuatorianas, sino de otros países, carteles para servir en áreas de transporte y de logística", añadió Navas en entrevista con Radio Sucesos.
Asimismo, subrayó que los autores de los ataques "no son grupos terroristas, son grupos organizados, grupos que no operan directamente en nuestro país, sino que están operando en Colombia, en el departamento de Nariño y Putumayo (sur), pero que utilizan o utilizaron al Ecuador como una línea logística para sacar la droga y para introducir los percusores químicos".
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Según sus datos, solo el pasado mes de enero el país incautó 7,5 toneladas de precursores químicos provenientes de territorio colombiano, con lo que se evitó el procesamiento de 20 toneladas de cocaína para el mercado internacional valoradas en 600 millones de dólares.
Ecuador cuenta al momento con alrededor de 12.000 uniformados desplegados en la zona fronteriza.
El segundo ataque ocurrió en la madrugada del 16 de marzo cuando un dispositivo de fabricación casera estalló cerca de un retén policial en Borbón (noroeste).
El tercer y cuarto atentado ocurrieron el 16 de marzo, cuando un vehículo policial recibió varios disparos en Alto del Tambo y dos militares resultaron heridos en El Pan, ambas zonas limítrofes con Colombia.