"Ni un organismo legal, que esté basado en el derecho internacional, fue atraído por Reino Unido en este caso", declaró a la televisión Rossiya 1.
A la vez, Zajárova indicó que Londres no tiene pruebas de que Moscú esté detrás de la intoxicación de Skripal.
"Nadie sabe qué veneno era, hablemos de manera honesta, incluso Theresa May, que no tiene datos reales", dijo.
"Entiendo perfectamente que cuando el Ministerio de Asuntos Exteriores del país está encabezado por personas que no tienen ninguna relación con la política exterior, que han construido toda su carrera sobre el populismo, que no tienen ni idea de la Organización para la Prohibición de las Armas Nucleares ni de la Convención pertinente […] Es normal que salgan y comiencen a asustar. Pero no hace falta asustar, simplemente no hace falta", ha señalado Zajárova.
Además Zajárova declaró que ni un medio británico podrá operar en el territorio de Rusia si Reino Unido cierra el canal televisivo ruso RT.
"Puedo decirles que ni un medio de comunicación británico operará en nuestro país si (las autoridades del Reino Unido) bloquean RT", dijo Zajárova a la cadena Rossiya 1.
Por su parte, el regulador británico del sector de las telecomunicaciones, Ofcom, afirmó que examinará posibles medidas contra el medio ruso tras el discurso de la primera ministra británica, Theresa May, ante el Parlamento, programado para el día 14.
A su vez la autoridad reguladora rusa de los medios de comunicación, Roskomnadzor, declaró que se tomarán medidas inmediatas de respuesta si Reino Unido retira la licencia del canal ruso RT.
"En el caso de que la reguladora británica retire la licencia de RT para la emisión en Reino Unido, Roskomnadzor tomará inmediatamente medidas simétricas contra los medios británicos que actúan en el espacio mediático ruso", dijo el jefe del ente, Alexandr Zhárov.
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El 4 de marzo la Policía británica encontró a dos personas inconscientes en un centro comercial en Salisbury, en el condado británico de Wiltshire, aparentemente envenenadas con un agente nervioso.
En 2006 una corte rusa le condenó a 13 años de cárcel por espiar a favor de un Estado extranjero.
Cuatro años después fue canjeado junto con otros dos individuos condenados por espionaje por diez personas detenidas en Estados Unidos.
En el mismo condado en que fueron envenenadas las dos personas se ubica uno de los laboratorios más secretos del Reino Unido en el que se desarrollaron agentes tóxicos durante la Guerra Fría.
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El 12 de marzo, la primera ministra británica, Theresa May, calificó de altamente probable que Moscú esté detrás del envenenamiento de los Skripal y dio de plazo hasta el miércoles para que la parte rusa presente una explicación.
La Cancillería de Rusia tachó de "circo" la declaración de May y afirmó que marca el inicio de una nueva campaña basada en una provocación.
El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, afirmó con anterioridad que Londres no ha proporcionado ninguna evidencia que apunte a la implicación de Moscú en el caso de Skripal, y que tampoco ha enviado solicitudes oficiales al respecto.
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, sugirió a Londres aclarar el intento de envenenamiento sobre el terreno antes de abordar el incidente con Moscú.