"Les invito a dar un giro a nuestras relaciones, que nos permita construir una paz justa y duradera, con integración y complementariedad entre nuestros pueblos; nuestra responsabilidad ante la historia es inaplazable", afirmó al leer un comunicado ante la prensa antes de abandonar Santiago.
El presidente boliviano además llamó a "resolver las heridas del pasado, aquellas que no buscaron nuestros pueblos pero que las sufrieron y de las todavía sienten sus efectos".
"Hago un llamado para que no escuchemos las voces de quienes quieren convertirnos en enemigos; escuchemos la voces que nos reclaman unidad y apertura para superar nuestras diferencias en base al diálogo y la negociación", añadió.
Morales insistió en la necesidad de una "solución justa" a la demanda de su país por una salida soberana al océano Pacífico, por la cual se enfrenta a Chile en la Corte Internacional de Justicia (CIJ), con sede en La Haya.
"Nadie podrá negar que una solución acordada y justa recibirá el apoyo desde todas las latitudes, desde todos los puntos cardinales", afirmó.
El próximo 19 de marzo comenzarán en La Haya los alegatos por el reclamo boliviano.
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A causa de un enfrentamiento bélico en 1879, Bolivia perdió 120.000 kilómetros cuadrados de territorio ante Chile, entre ellos 400 kilómetros de costa.
Ambos países interrumpieron sus relaciones diplomáticas en 1978 a causa de este diferendo.
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