"La acción represiva del Estado español condiciona la acción política", asegura Sirvent en una entrevista con el portal Vilaweb.
Y agrega que "frente a cualquier chantaje que implique una regresión en derechos civiles y políticos para todo el pueblo de Cataluña, se ha de responder con la legitimidad del mandato popular".
"Nos encontramos en una encrucijada y hay que tomar una decisión: o se acata el marco autonómico y la regresión democrática o se avanza hacia la República al servicio de los derechos y las libertades de la ciudadanía", sentencia.
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Sirvent defiende que si los catalanes quieren un Estado independiente, el Gobierno catalán ha de "controlar los sectores estratégicos y ponerlos al servicio de las necesidades y la soberanía de la ciudadanía".
Este programa, prosigue, pasaría por la creación de un sistema de educación y sanidad públicos, pero "también hemos de tener el control del territorio".
"Es necesario controlar aeropuertos, puertos, autopistas, red ferroviarias… todo eso es desplegar la República", explica.
Para la diputada de la CUP, "las instituciones autonómicas son un espacio completamente vacío de soberanía".
Sirvent sostiene que la independencia de Cataluña "no será una cosa de un día ni de dos", pero "para hacer un proceso constituyente hemos de hacer un proceso destituyente, que exige una ruptura".
"No aceptaremos una propuesta autonomista, y si eso lleva a la convocatoria de nuevas elecciones, que no son una opción óptima para nosotros, iremos", advierte la diputada al resto de fuerzas soberanistas.
Sirvent insiste en que su partido no aceptará ninguna "regresión en derechos y libertades para todo el pueblo de Cataluña" y que "no dará ningún paso que contribuya un retorno al autonomismo", incluso si eso supone abandonar el Parlamento de Cataluña como protesta.