El tornado golpeó las instalaciones militares en junio de 2017, pero las estimaciones sobre los daños acaban de ser ahora divulgadas públicamente. Los representantes de las Fuerzas Aéreas han explicado que 32 edificios han sido dañados, de los que solo 12 han sido reparados, informa la agencia Associated Press.
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Estas aeronaves deberían servir como centros de mando aéreo en caso de emergencia nacional, por ejemplo, si se iniciara una guerra nuclear o si las estructuras de control en tierra fueran destruidas.
Según la Fuerzas Aéreas de EEUU, estas aeronaves están destinadas para el presidente y el secretario de Defensa de EEUU, además de para los altos mandos de las Fuerzas Armadas. El costo de cada uno de estos aviones es de aproximadamente 200 millones de dólares. Las Fuerzas Aéreas suelen mantener al menos cuatro E-4B en perfecto estado por si tuvieran que ser utilizados.
