Las empresas italianas van reconquistando sus posiciones cedidas en el mercado ruso, acercándose rápidamente a las cifras máximas del período antes de la introducción de sanciones con 8.000 millones de euros en exportaciones.
"Las preferencias tributarias y el revolucionario proyecto de armar la producción en Rusia usando el saber hacer italiano" allanaron el camino para el rápido crecimiento, comentó a Sputnik Italia el especialista en comercio digital y en negocios bilaterales ruso-italianos, Giulio Gargiullo.
Ejemplo: El queso francés 'made in Russia' conquista el mercado
Uno de los ejemplos de una cooperación exitosa es la apertura en Moscú del proyecto gastronómico italiano Eataly.
Otro factor importantísimo son las zonas económicas especiales en Rusia que ofrecen "increíbles preferencias tributarias", según el experto.
Las tasas de impuestos en Rusia en general y en particular en estas zonas son mucho menores que en Italia, así que para los fabricantes italianos es una gran oportunidad.
Buenas relaciones a pesar de todo
El especialista destaca que las relaciones entre los dos países están en auge, a pesar de la permanencia de las sanciones.
Otro aspecto importante es el turismo, ya que Italia sigue siendo un importante destino turístico desde Rusia, un factor fortalecido por el 'año de turismo' simétrico celebrado en 2014.
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