"Todos esos señalamientos no tienen fundamento en absoluto; en ninguna parte se han presentado pruebas, evidencias, testimonios", respondió el diplomático.
Acerca de las declaraciones de Tillerson, hechas el 2 de febrero pasado durante una visita oficial a México, advirtiendo que Rusia "tiene tentáculos en diferentes elecciones en el mundo", Malayán se preguntó si esa declaración no fue "una injerencia en los asuntos internos de México".
"¡Gracias a dios no nos acusan todavía de mandar a México la expedición de Hernán Cortés! [el conquistador español del siglo XVI]", bromeó el diplomático.
El embajador ruso replicó que "los estadounidenses tratan de entender cómo fue que [Donald] Trump llegó al poder y hasta ahora no pueden comprenderlo; no hay ningún testimonio o prueba de la supuesta intromisión (de Rusia en las elecciones presidenciales de EEUU) y cuando les preguntamos a qué se refieren, nos dicen que es una información secreta que no pueden compartir".
Malayán añadió que "se culpa a mi país de todo lo que sucede en el mundo, porque nadie esperaba que Rusia pudiera levantarse otra vez y tener su propia voz".
El jefe de la legación rusa reveló que al único precandidato que no conoce es justo a López Obrador, pero que sí ha tenido encuentros con Meade y Ricardo Anaya, aspirante de una coalición centrista, al tiempo que adelantó que el Gobierno de Rusia trabajará con quien resulte electo.
"He tratado a Meade y Anaya, nunca me he encontrado con López Obrador", replicó.
Le puede interesar: "Ahora vamos a por México": senador ruso 'trolea' a un asesor de Trump
El embajador comentó al periódico que "desde la disolución de la Unión Soviética, Rusia nunca se ha entrometido en los asuntos internos de ningún país".
Malayán expresó que, hasta la fecha, ninguna autoridad del gobierno federal se ha acercado a dialogar con la embajada sobre ese asunto.
"No tenemos temas cerrados; si tienen algunas preguntas, estamos dispuestos a responder", puntualizó.
No se lo pierda: El cuento de los rusos que desestabilizan democracias llega a México
El intercambio comercial entre México y Rusia se ha incrementado a más de 2.000 millones de dólares, y empresas rusas como Lukoil han ganado contratos petroleros para explorar y explotar yacimientos mexicanos, tras la apertura del sector energético emprendida por Peña Nieto.