"Abandonaron dos bases militares de la guardia presidencial a condición de que no se entreguen bajo el control de los comandantes del entorno de Hadi (el actual presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi) y su vice, Ali Mohsen, que tiene vínculos con los Hermanos Musulmanes (organización considerada terrorista en varios países, incluida Rusia)", dijo el interlocutor.
Además, los separatistas exigieron designar al sobrino del asesinado expresidente del país, Alí Abdalá Saleh, como comandante en jefe de las tropas de Abdo Rabu Mansur Hadi y apoyarlo en la lucha contra los rebeldes hutíes.
Los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los partidarios de restablecer la independencia de Yemen del Sur se recrudecieron el 28 de enero tras vencer el plazo del ultimátum que los secesionistas habían presentado para formar un nuevo Gabinete.
Los separatistas formaron en mayo pasado su propio Consejo de Transición del Sur, órgano secesionista, que supuestamente obtuvo el apoyo de los Emiratos Árabes Unidos.
La situación se desarrolla en medio del continuo conflicto entre las autoridades yemeníes y los insurgentes rebeldes hutíes del movimiento Ansar Alá que empezó en 2014.
El conflicto se agudizó a principios del pasado diciembre, cuando los hutíes acusaron de traición a sus aliados en la lucha contra el Gobierno y mataron al expresidente Alí Abdalá Saleh, quien había instado a combatir a los insurgentes.