"Esto es una victoria para el Parlamento y para nuestro país", celebró en un tuit Keir Starmer, responsable laborista en lo referente a la Salida de la Unión Europea.
El informe proyecta un retroceso económico a largo plazo en diversos escenarios estudiados, que repercutirá en la mayoría de sectores y en todas las regiones británicas, según difundió Buzzfeed.
"Quiero estudiar estos documentos en su totalidad y contribuir a asegurar que la política británica se apoye en el futuro en datos, no en ideología", señaló Starmer.
El Gobierno claudicó en la batalla parlamentaria pero aún se reserva los últimos cartuchos respecto a este supuestamente secreto informe.
El documento sobre el nocivo impacto del brexit —ya sea tras una ruptura suave o una divergencia radical con la UE— se publicará sin referencias que puedan dañar la baza negociadora de Reino Unido, según advirtió el secretario de Estado en el ministerio de la Salida, Robin Walker.
Además, una vez redactado el informe, solo se difundirá bajo estrictas medidas de confidencialidad entre un puñado de parlamentarios.
La presidenta del Comité en Finanzas, la exministra conservadora Nicky Morgan, ha exigido ya su inmediata publicación.