"Nuestro congreso se pronunció por dar un nuevo aliento al proceso negociador de Ginebra", dijo Lavrov en una rueda de prensa al término del Congreso del Diálogo Nacional de Siria celebrado en Sochi.
"Significa que todos los pasos que se darían en adelante deben ser objeto de un acuerdo entre el Gobierno sirio y la oposición", señaló el jefe de la diplomacia rusa.
Según recalcó, "no se hará nada sin el consentimiento del Gobierno y sin el consentimiento de la oposición".
El 30 de enero se celebró el segundo día del Congreso del Diálogo Nacional Sirio, convocado por iniciativa de Rusia y acordado en las conversaciones sirias de Astaná, que busca propiciar un proceso político inclusivo y contribuir a la reconciliación y las reformas políticas en el país árabe.
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En total en el foro participaron más de 1.500 delegados, "representantes de distintos grupos sociales, políticos, religiosos y étnicos de la sociedad siria", según anunció el comité organizador del evento.
La solución a la crisis siria se debate además en las negociaciones de Ginebra auspiciadas por la ONU; en total se llevaron a cabo ocho rondas de consultas.
Las consultas en la ciudad suiza están centradas en las llamados cuatro paquetes temáticos que incluyen cuestiones relacionadas con el sistema de Gobierno, la elaboración de una nueva Constitución, elecciones y lucha contra el terrorismo en un país devastado por la guerra.