"Es una persona con conocimiento y manejo de explosivos, se ha movido en zonas y rutas que acostumbra el ELN; en ese momento (2015) quedó libre porque un juez afirmó que no se habían garantizado sus derechos, y ahora se ve involucrado en estos actos de Barranquilla", indicó Villegas a la emisora local Blu Radio.
El 29 de enero fue aplazada la audiencia de imputación de cargos a Bellón, luego de que pidió ser representado por un abogado contractual pagado por su familia y no por uno asignado por la Defensoría del Pueblo, organismo encargado de velar por los derechos humanos en el país.
Se prevé que la audiencia sea retomada este martes, cuando la Fiscalía le imputará los cargos de homicidio agravado, tentativa de homicidio, terrorismo agravado y uso de explosivos.
Esa guerrilla y el Gobierno mantienen diálogos públicos de paz en Quito desde febrero de 2017 para lograr poner fin a un conflicto armado de medio siglo de existencia.
En el marco de esas negociaciones ambas partes pactaron un cese del fuego bilateral de 101 días que finalizó el pasado 9 de enero, pero pasada la medianoche de ese día, tras el término de la tregua, el ELN empezó una serie de atentados contra la infraestructura petrolera del país y contra unidades de la policía y del Ejército.
La semana pasada Bell regresó a Quito para intentar destrabar las negociaciones con el ELN y acordar un nuevo cese del fuego bilateral con esa guerrilla, pero tras el anuncio de Santos del lunes esa posibilidad se observa ahora más lejana, pese a que hay voces internacionales, entre ellas la Organización de las Naciones Unidas, que piden mantener los diálogos.