"No venimos a gestionar una comunidad autónoma intervenida por el Estado español a través de los artículos 135 y 155 de su Constitución, tampoco a generar independentismo mágico: ¡nosotros, a luchar por hacer realidad la República catalana que dé una vida digna a las clases populares!", escribió Aragonés en su cuenta de Twitter.
No venim a gestionar una Comunitat Autònoma intervinguda per l'Estat espanyol a través dels articles 135 i 155 de la seva constitució, tampoc a generar independentisme màgic. Nosaltres a lluitar per fer realitat la República Catalana que doni vida digna a les classes populars!
— Vidal Aragonés (@VidalAragones) January 25, 2018
A pesar de contar solamente con 4 parlamentarios, la CUP resultará imprescindible tanto en la votación de investidura como para la estabilidad de un futuro gobierno catalán de signo independentista.
La consulta fue unilateral, ya que el Gobierno de España se negó a aceptar un referéndum pactado.
Un 92% de los votantes, más de dos millones de participantes, se manifestó a favor de la independencia de Cataluña.
La jornada electoral estuvo marcada por la dureza de la respuesta policial, que clausuró colegios, incautó papeletas y dispersó a las personas que trataban de proteger los puntos de votación.
La Generalitat de Catalunya y el Parlamento catalán consideraron los resultados vinculantes y la cámara catalana declaró la independencia el 27 de octubre.
La declaración no tuvo efecto ni reconocimiento internacional y el Gobierno de España activó el artículo 155 de la Constitución española, que permite la intervención de una administración autonómica por parte del Ejecutivo central.