El ingreso de Suecia en la OTAN, según el diplomático, significaría un cambio radical en el ámbito de la seguridad.
Con respecto a la reacción de Moscú a este posible paso de Estocolmo, el diplomático enfatizó que el esquema militar de Rusia cambiaría de forma radical.
"Si esta situación surge tendríamos que tomar medidas para defendernos de un ataque de la OTAN desde el territorio de Suecia", sostuvo.
Tatárintsev reveló al medio sueco que la Embajada de Rusia en Suecia trató varias veces de conseguir una invitación para los expertos rusos a esta conferencia, pero todos sus intentos resultaron en vano.
"Si la OTAN está allí, Rusia también debería estar allí. Si Suecia está afuera de esas alianzas hay que observar que se mantenga el balance", señaló el diplomático a la vez que declaró que todas las acusaciones de que Rusia fuese la culpable de que la situación relacionada con la seguridad empeorara "eran un disparate".
El embajador desmintió las acusaciones de que Rusia intentara influir sobre la opinión pública en Suecia. Asimismo, rechazó las declaraciones hechas por Gunnar Karlsson, jefe de la inteligencia militar del país escandinavo, quien calificó a Rusia como la principal fuente de los ataques cibernéticos.
El diplomático exhortó a que se muestren pruebas convincentes y a que se citen ejemplos concretos en los que Rusia haya realizado campañas para influir en la opinión pública.
