Oficialistas opinan que refuerza los derechos políticos de los ciudadanos, pero críticos advierten un deterioro de las instituciones democráticas.
"Lo que ha ocurrido este 2017 muestra que estamos afrontando un serio problema de debilitamiento de las instituciones democráticas", dijo a Sputnik el presidente del colegio de politólogos de Bolivia, Ludwin Valverde.

El dictamen conocido a fines de noviembre causó revuelo político y puso en cuestión no solo el respeto a la Constitución Política que limita la relección presidencial a una sola vez consecutiva, sino que también desconoció el referendo constitucional del 21 de febrero de 2016 que cerró el paso a la repostulación de Morales.
"El referendo de 2016 articuló varios niveles de crítica hacia a la gestión de Gobierno en temas de corrupción en altas esferas gubernamentales y hacia esta intención de una prorroga en el poder sin límite de tiempo", opinó Valverde.
Para Valverde, el estado de Derecho en Bolivia se ha visto afectado toda vez que se ha impuesto una decisión desconociendo la propia Constitución Política boliviana, que fue resultado de una Asamblea Constituyente y refrendada en 2009.
"Los últimos sucesos que se han producido en Bolivia, particularmente esta intención de desobedecer la voluntad ciudadana que se expresó en la aprobación de la Constitución en 2009 y el 21 de febrero de 2016 para que primen los intereses personales, ponen en serio problema a la democracia", opinó.
Democracia asegurada
No obstante, autoridades de Gobierno y el propio Morales han celebrado la decisión del Tribunal Constitucional porque permitirá la continuidad de lo que el oficialismo llama la Revolución Democrática y Cultural, iniciada en enero de 2006.
"Los bolivianos y bolivianas seguirán acudiendo a las urnas para elegir a sus autoridades, no hay de qué preocuparse", remarcó.
La legisladora oficialista recordó que el MAS acudió a la vía legal para habilitar al presidente Morales para un nuevo mandato para el 2020-2025 y "ha sido esa instancia (el Tribunal Constitucional) que se ha pronunciado".
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"El 2019 iremos a las urnas, el MAS ya ha anunciado quién es su candidato y estamos esperando, desde esta acera, que la oposición plantee algún tipo de proyecto para el país", afirmó Silva.
"Para nosotros es importante que este año, en Bolivia, se haya marcado un antecedente respecto a los derechos políticos que tenemos las ciudadanas y ciudadanos a elegir", puntualizó la diputada por el departamento de La Paz (noroeste).
El 16 de diciembre, pese a las críticas, el MAS se ha declarado en campaña electoral y oficializó el binomio Morales-García Linera para las elecciones generales de 2019.