"El camino no puede llevar de nuevo al enfrentamiento o a la exclusión y sí debe conducir a que la convivencia en el seno de la sociedad catalana recupere la serenidad, la estabilidad y el respeto mutuo", afirmó el jefe de Estado español.
El mensaje navideño del rey español ha generado grandes expectativas políticas apenas tres días después de la celebración de las elecciones catalanas.
El partido más votado en los comicios fue el unionista Ciudadanos, que consiguió 37 escaños con un 25,37% del total de votos.
Sin embargo, la suma de fuerzas unionistas —58 diputados— no consiguió arrebatar el dominio al independentismo; el Partido Socialista de Cataluña cosechó 18 escaños (13,88% de votos) y el Partido Popular de Rajoy consiguió 3 diputados, situándose como fuerza menos votada entre las que consiguieron representación con un 4,24% de los votos.
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Fuera de la lógica de esos dos bloques se sitúa la candidatura de Cataluña en Común, en la que participa Podemos, que obtuvo 8 escaños con el 7,45% de los votos.
Estas elecciones estuvieron marcadas por una participación del 81,9% de los 5,5 millones de personas que estaban llamadas a votar, lo que marca una cifra récord en la región y da una idea de la relevancia de los comicios para la población local.