"Las declaraciones contradictorias que hacen nuestros socios estadounidenses en el mejor de los casos desorientan y en otros casos provocan a Corea del Norte a actuar de un modo insensato", afirmó.
Según Denísov, "tiene lugar una llamada 'escalada negativa': las partes van escaleras abajo".
"La respuesta ante una nueva estocada de la parte contraria implica bajar un escalón más, y a ello le sigue, correspondientemente, la respuesta de la otra parte", comentó.
El diplomático ruso subrayó que "ante esa situación no vemos ni consideramos posible debatir una solución que no sea la del diálogo, una solución por medios políticos y diplomáticos".
Denísov destacó el papel de Pekín y Moscú en la búsqueda de soluciones al señalar que "en la práctica justamente Rusia y China son quienes ofrecen un aporte serio a la búsqueda de soluciones".
El representante de la diplomacia rusa en la nación asiática constató que Rusia y China tienen una visión casi idéntica de la vía de solución del problema en la región.
"De China, de Rusia, y de nuestros esfuerzos solidarios conjuntos depende no ya solo la búsqueda de una solución, sino la propia capacidad de la Humanidad de evitar el peor de los escenarios posibles, es de esto de lo que hablamos ahora", insistió.
Denísov señaló que las pruebas nucleares realizadas en el polígono norcoreano tienen lugar a solo 100 kilómetros de la frontera con China, y la población china se ve afectada también por estas pruebas, o al menos, enfrenta graves riesgos.
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La ciudad rusa de Vladivostok también se halla en relativa cercanía del polígono.
"Asumimos esta situación de un modo totalmente diferente (al de EEUU), y la amenazas son bien distintas, se trata de una situación extremadamente compleja e incluso peligrosa, no me asusta decirlo", subrayó el diplomático.
La situación actual en la península de Corea es muy preocupante debido al incremento del factor de la imprevisibilidad de todas las partes, agregó Andréi Denísov.
"En estos momentos el agravamiento de problema está vinculado al incremento del factor de imprevisibilidad en el comportamiento de todas las partes", alegó.
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Según el diplomático ruso, "Corea del Norte realiza espontáneamente pruebas nucleares y ensayos de misiles, lo cual es inevitablemente condenado tanto por nosotros como por China, y todo el mundo coincide en considerar como inadmisible la nuclearización de la península coreana".
"Del lado contrario, también se observa un incremento del factor de imprevisibilidad", señaló.
El embajador ruso expresó su esperanza de que "no hayamos llegado al fondo, pero la situación es bastante alarmante, precisamente debido a que es impredecible".
Corea del Norte disparó el 29 de noviembre un nuevo misil balístico intercontinental, Hwasong-15, supuestamente capaz de llevar una ojiva nuclear de gran tamaño a cualquier punto en territorio de EEUU.
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A principios de julio pasado, Moscú y Pekín se pronunciaron por declarar una moratoria simultánea sobre el programa norcoreano de misiles y armas nucleares y los ejercicios conjuntos a gran escala de EEUU y Corea del Sur, así como avanzar hacia la desnuclearización de la península de Corea.