"Los interlocutores norcoreanos aceptaron que es importante prevenir la guerra", dijo a la prensa.
Cómo hacerlo, agregó, fue un tema de la discusión que continuó más de 15 horas.
"Dijimos a los cargos oficiales de Corea del Norte que creemos verdaderamente que deben mostrar su disposición a ir por otro camino, iniciar algunos preparativos, empezar a examinar las consultas", afirmó el subsecretario general de la ONU.
El alto cargo de la ONU visitó Corea del Norte una semana después de que Pyongyang realizara un nuevo ensayo de un misil balístico intercontinental.
Según afirmó Pyongyang, el misil probado el 28 de noviembre es capaz de portar una ojiva nuclear pesada e impactar cualquier punto en el territorio continental de EEUU.
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En lo que va de este año Corea del Norte realizó una quincena de ensayos de misiles balísticos y la sexta prueba nuclear, la de una bomba de hidrógeno para ser colocada en misiles intercontinentales, pese a numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que le prohíben a Pyongyang desarrollar tales actividades.