Los resultados se definieron más de una semana después de realizados los comicios
El 4 de diciembre el Tribunal Supremo Electoral de Honduras (TSE) ha concluido el recuento de votos de la elección presidencial del 26 de noviembre, aunque sin proclamar oficialmente al ganador. Juan Orlando Hernández, aspirante a la reelección por el gobernante Partido Nacional, contabilizó 1.375.568 votos contra 1.324.308 de Nasralla.
La diferencia entre ambos es de 51.260 (1,61%) votos. Todavía falta la declaratoria oficial, que puede tardar 22 días, debido a las impugnaciones que deben revisarse.
Los enfrentamientos desatados tras las votaciones dejaron siete muertos
Durante el conteo de votos el máximo candidato opositor, Salvador Nasralla, llevaba la delantera. Pero un apagón informático obligó a interrumpir el escrutinio. Al reiniciarse, Hernández pasó al frente y su rival denunció fraude electoral y exigió un recuento. Esto desató una ola de violencia.
Otra manifestante consultada por el periodista aseguró que hubo hechos de represión y personas desaparecidas. "Hemos sido amenazados. La Policía dijo que no viene con gas lacrimógeno, sino con balas. Los jóvenes que estamos aquí no traemos armas ni somos una amenaza para nadie. Nuestra bandera es la lucha por Honduras", aseguró mientras se escuchaban gritos de "fuera JOH" (Juan Orlando Hernández).
Hubo saqueos a comercios, más de 500 detenidos, 20 heridos y siete muertos. El 1 de diciembre el Gobierno decretó un toque de queda desde las 18 a las 6. Tras la medida, las fuerzas de seguridad podrán detener a cualquiera que encuentren fuera del horario de circulación establecido o que sea sospechoso de haber causado daño a personas o bienes. Sin embargo, jóvenes de todo el país continúan movilizándose en las carreteras hondureñas.
Dos candidatos se proclamaron presidentes de Honduras
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Hace ocho años Juan Orlando Hernández hubiera sido expulsado del país
El expresidente Manuel Zelaya fue derrocado en 2009 cuando alentaba el llamado a una Asamblea Constituyente con la intención de introducir la reelección presidencial en la Constitución. Por ese motivo fue sacado de su cama en pijama por militares y enviado a Costa Rica. Hoy, sin reforma constitucional, Hernández pudo postularse a la reelección inmediata gracias a un fallo judicial.
