Los cuentos de princesas como "La bella durmiente", "La bella y la bestia" y "Aladdín" pueden esconder mensajes que, vistos desde la óptica actual, develan situaciones de acoso que de manera inconsciente quedan grabados en las memorias de niños y niñas.
Si Aurora, Bella y Jazmín, y otras protagonistas de los cuentos infantiles fueran personajes reales y tuvieran redes sociales, es posible que sus historias acompañaran las denuncias de todas las mujeres víctimas de acoso sexual en la industria cinematográfica de Estados Unidos. Sin embargo, muchas de ellas sirven de referente para la infancia a la hora de concebir la sexualidad y el amor.
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Quizás el caso más representativo en Disney es el de la princesa Aurora, protagonista del clásico "La bella durmiente" (1959) quien mientras dormía hechizada fue besada en nombre del "amor verdadero", único antídoto contra el mal que la mantenía inconsciente.
En el film Aurora conoce a Felipe en el bosque mientras vivía oculta con sus madrinas pero huye de él por tratarse de un extraño. La noche antes de su cumpleaños 16, quedó hechizada tras pincharse el dedo con el huso de una rueca que la bruja Maléfica había preparado en venganza de los reyes.
Pero el equipo de Disney solo edulcoró la versión original del poeta y escritor italiano Giambattista Basile, que resulta más aterradora en este sentido. Esta historia relata que un rey encuentra una princesa inconsciente en una torre y decide violarla.
Meses más tarde decide que la extraña y regresa a buscarla cuando descubre que es la madre de sus gemelos. El rey le confesó la violación a la princesa pero esta lo perdona y le dice que lo ama.
La historia de Disney edulcoró la esencia abusiva del cuento original.
"La bella y la bestia" (1991), violencia y secuestro de fantasía
Bella nos enseña que podemos aceptar y perdonar a nuestro acosador, y que siendo amorosas podemos lograr un cambio de conducta en un secuestrador e incluso verlo más seductor. Esta princesa nos hace confiar en el final feliz, a pesar de la violencia y el acoso, con hechos alejados de la realidad y del significado.
Sin embargo, el secuestro de Bella y su historia la convierten en la primera princesa de Disney que logra conocer y compartir momentos con su príncipe antes de sentirse enamorada, dejando atrás la concepción del amor a primera vista.
"Aladdín" (1992): Jazmín la princesa seductora
En la historia de Walt Disney, la princesa Jazmín se muestra desde el inicio como una mujer seductora que utiliza la sensualidad de sus movimientos y su pelo para lograr convencer a los hombres, ya sea Aladdín o el malvado Jafar.
Jasmín es la hija de 15 años del Sultán de Agrabah que nunca está dispuesta a casarse con los príncipes que su padre sugiere, mostrándose como una joven rebelde y con criterio propio, aunque capaz de usar su cuerpo como objeto de seducción, al punto que seduce y besa a Jafar para que Aladdín recupere su lámpara.
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En la película ésta es acosada constantemente por Jafar, quien ansía casarse con la princesa por intereses de poder. Sin embargo, Jazmín nunca es capaz de resolver la situación, incapaz de pensar una trampa o una estrategia que la salve del mal.
Por suerte en la actualidad las princesas han vivido una evolución que se refleja en películas como Brave, Frozen o Mohana donde se muestra un modelo de mujer que sabe valerse por sí misma y que puede construir una historia sin la aburrida necesidad de salvación de un compañero.