"El misil es capaz de volar más de 13.000 kilómetros, lo que significa que puede alcanzar Washington", indicó el departamento militar surcoreano en un comunicado.
Según los militares surcoreanos, el nuevo proyectil balístico de Pyongyang es dos metros más largo que el Hwasong-14 y más ancho.
Además los norcoreanos emplearon una plataforma de lanzamiento móvil de 18 ruedas, como se ha podido ver en las imágenes publicadas por los medios locales.
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Los expertos militares de Corea del Sur reconocieron que el ensayo balístico norcoreano ha sido un éxito.
Pese al parón de las pruebas balísticas norcoreanas, Estados Unidos no frenó sus maniobras militares en la península de Corea desatendiendo los llamados de Rusia de detener la escalada de las tensiones.
El pasado 27 de noviembre el viceministro ruso de Exteriores Ígor Morgúlov esbozó en Seúl una hoja de ruta para resolver la crisis coreana.
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La segunda etapa supone iniciar negociaciones directas entre Pyongyang y Washington y entre las dos Coreas y en la tercera fase se prevé comenzar negociaciones multilaterales para crear un mecanismo de paz y seguridad en el noreste de Asia que posibilite desnuclearizar la península de Corea y desmilitarizar la región.