"Creo que los afrodescendientes de los quilombos no hacen nada, creo que ni como procreadores sirven más". Esto dijo el diputado del Partido Social Cristiano en abril, lo cual le valió una multa equivalente a 16.000 dólares por fomentar el odio.
Con 62 años, este político evangelista que fue el diputado más votado en 2016, va segundo en las encuestas para los comicios presidenciales de 2018 detrás de Lula.
Algunos lo llaman 'el Trump brasileño', pero su trayectoria comenzó mucho antes, a fines de los años 90. Desde entonces, sus declaraciones políticamente incorrectas lo han convertido en un personaje muy buscado. Cuando votó a favor del juicio contra Dilma en abril de 2016, lo hizo en homenaje a Carlos Alberto Brilhante Ustra, jefe de Inteligencia de la dictadura (1964-1985), torturador de Rousseff.
"Suramérica tendrá un gran problema si este señor y su proyecto llegan a presidente", le dijo a Sputnik el analista salvadoreño Luis Armando González.