Actualmente la aviación de combate se divide en función de la especialidad que tenga cada aeronave. Sin embargo, la producción de aviones tiende a la unificación, según señala el ingeniero.
"Se trata de vuelos sobre el mar y sobre la tierra, son cosas considerablemente distintas debido a los tipos de superficie, la visibilidad y los obstáculos. Y si a ello le añadimos diferentes tipos de armamento, el alcance de la labor será mucho mayor", destaca.
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Al hablar sobre el combate aéreo —considerado por algunos como una maniobra obsoleta—, Korotkov afirma que de todas maneras es mejor disponer de un equipamiento apto para los ataques a corta distancia. Por lo tanto, los parámetros de maniobrabilidad seguirán teniendo importancia y las maniobras aéreas serán una parte integrante de la capacitación de los pilotos en todo el mundo.
"En este ámbito se producen no solo aviones de combate. Por ejemplo, los ingenieros pretenden crear un sistema de transporte no tripulado en Oriente Medio para resolver el problema de la conectividad del transporte en las zonas escasamente pobladas", explica Korotkov.
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Por muy rápido que se desarrolle la producción de las aeronaves no tripuladas, el diseñador general de la Corporación de Aeronaves Unidas no cree que la profesión de piloto vaya a desaparecer, ya que la tecnología actual requiere de la presencia de una persona que se encargue de la toma de decisiones.