"La paz y la armonía deben caracterizar nuestra relación antes y después de las elecciones democráticas en 2018", dijo citado por la BBC.
Además Mnangagwa llamó a revisar las sanciones económicas y políticas contra su país.
"A medida de que se construya un nuevo Zimbabue democrático llamamos a los que nos castigaron en el pasado a revisar las sanciones económicas y políticas en nuestra contra", dijo.
Mnangagwa aseguró que "el Gobierno garantizará el pago de sus deudas internas y externas".
El 24 de noviembre Mnangagwa prestó juramento como nuevo presidente de Zimbabue ante miles de personas reunidas en el Estadio Nacional en la capital zimbabuense.
El 22 de noviembre el partido gobernante ZANU-PF nombró a Mnangagwa para sustituir al expresidente Robert Mugabe, quien dimitió el 21 de noviembre.
Mnangagwa, de 75 años, se fue del país después de que Mugabe le retirara del Gobierno y del partido con la presunta intención de colocar en su lugar a su esposa, Grace.
Le puede interesar: "Derrocamiento de Mugabe se planeaba desde hace mucho"
A partir del pasado 15 de noviembre Mugabe fue puesto bajo arresto domiciliario.
El 21 de noviembre en el Parlamento comenzaron los debates sobre el proceso de destitución, pero fueron suspendidos por el anuncio de dimisión de Mugabe, quien hasta aquel entonces fue el mandatario más longevo del mundo, de 93 años, que estuvo 37 años gobernando Zimbabue.