"Es importante apoyarles para que puedan retomar su vida original", señaló Kono, citado por Kyodo.
El titular de Exteriores japonés visitó uno de los campos de Cox's Bazar acompañado de sus homólogos de Alemania y Suecia, Sigmar Gabriel y Margot Wallström, y el jefe de la diplomacia bangladesí, Mahmood Ali.
La Organización Internacional para las Migraciones estima el número de refugiados rohinyás en Cox's Bazar en 826.000, incluyendo unos 613.000 que escaparon de Birmania desde el 25 de agosto.
La cifra de las personas que necesitan asistencia es de 1,2 millones, según los datos correspondientes al 9 de noviembre.
Para ayudarles se requieren al menos 120 millones de dólares, de los cuales solo una cuarta parte está disponible.