El monumento, de 4 metros de longitud, fue instalado en el lugar que ocupaba el palacio de Mali, donde falleció el emperador el 1 de noviembre de 1894. El edificio del palacio fue totalmente destruido durante la Gran Guerra Patria.
La estatua del emperador está colocada en un pedestal de mármol blanco y va acompañada de la célebre frase del monarca: "Rusia tiene solo dos aliados: el Ejército y la Flota". La segunda parte del monumento es una estela con un bajorrelieve que muestra las imágenes de los mayores logros de la época del reinado del emperador, como la creación del rifle Mosin, así como la fundación de numerosas fábricas y plantas, el desarrollo de la industria petrolera y la construcción del ferrocarril Transiberiano en 1904 y de la Catedral de Cristo Redentor de Moscú, entre otros eventos. Asimismo, muestra a las personas más importantes de aquella época, como el escritor León Tolstói o el compositor Piotr Chaikovski.
En la ceremonia también participaron el líder de la república de Crimea, Serguéi Aksiónov, el gobernador de Sebastópol, Dmitri Ovsiánnikov, el representante del presidente en el Distrito Federal Sur, Vladímir Ustínov, el metropolita de Simferópol y Crimea, Lázar, y el muftí de Crimea, Emirali Abláev.
Según declaró el mandatario ruso, Alejandro III fue "el emperador que trajo a Rusia la paz, la gloria, el desarrollo y la estabilidad, fue el emperador pacificador". Putin definió a Alejandro como un "patriota que hacía todo lo posible para desarrollar y fortalecer al país" y subrayó que el emperador dio a Rusia 13 años de paz "no con concesiones, sino con su firmeza inquebrantable e imparcial".
El presidente recordó que el emperador defendía los intereses de Rusia de manera directa y abierta, "y este rumbo político garantizó el crecimiento de la influencia y de la autoridad de Rusia en la arena internacional".
Putin destacó también que bajo el reinado de Alejandro III se desarrolló activamente la capacidad industrial del país y entró en vigor una legislación laboral bastante progresista para su época. Además, fue Alejandro quien inició el rearmamento del Ejército del Imperio ruso.
"Al mismo tiempo, creía que un Estado fuerte, independiente y soberano no solo debe basarse en el poderío económico y militar, sino también en las tradiciones. Entendía que es importante para un gran pueblo conservar su identidad, y que es imposible avanzar sin respetar la historia, las tradiciones y los valores espirituales", subrayó.
Asimismo, expresó su confianza en que "las actuales y futuras generaciones, al igual que nuestros grandes ancestros, lo harán todo para el bienestar y la prosperidad de nuestra patria".