"Quiero ser el último herido por bala de goma en todo el Estado español", afirmó en rueda de prensa Roger Español, que como consecuencia del disparo perdió la visión en el ojo derecho, aunque una cirugía le permitió mantener el globo ocular.
La representación legal de Español en esta causa correrá a cargo de Irídia, una entidad dedicada a la protección de los derechos humanos que también llevó el caso de Ester Quintana, una mujer que perdió un ojo en 2012 por una pelota disparada por los Mossos d'Esquadra, la policía autonómica catalana.
Según explicó la abogada Laia Serra, la defensa dispone de un vídeo en el que puede verse el el momento del disparo, aunque en él no se puede identificar al agente que lo efectuó porque éste lleva un casco de antidisturbios y no se ve su número de identificación.
Sin embargo, la defensa sí tiene los números de identificación de los mandos presentes en el operativo, que pudieron ver cómo su subordinado disparaba a la gente de manera directa a menos de 15 metros "siendo consciente de que ponía en riesgo la integridad de algunos de los presentes".
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Irídia difundió este 14 de noviembre un vídeo en redes sociales en el que Roger Español narra lo sucedido desde su punto de vista.
ATENCIÓ | Roger, qui va patir l'impacte d'una bala de goma en l'ull el passat 1 d'Octubre a l'escola Ramon Llull explica en un VIDEO el seu relat | No pararem fins a aconseguir #StopBalasGoma https://t.co/8lqu6ytup1 @metromuster pic.twitter.com/gFwDOGLQnm
— IRIDIA (@centre_IRIDIA) 14 ноября 2017 г.
El suceso tuvo lugar durante la mañana del 1 de octubre en el colegio Ramón Llull de Barcelona, donde los agentes se personaron para dar cumplimiento de las órdenes judiciales que les encomendaban la tarea de incautar el material electoral del referéndum, en aquellos momentos suspendido cautelarmente –y posteriormente de manera definitiva– por el Tribunal Constitucional español.
De acuerdo con su relato, Roger Español seguía el recorrido de los policías que abandonaban el lugar ya que éste coincidía con el camino de vuelta a su domicilio, donde pensaba dirigirse.
"Mientras esperábamos a que se fueran, no sé ni cómo ni cuándo, sentí un disparo y en seguida recibí el impacto de la pelota en el ojo", apunta.
En ese momento, Español se tiró al suelo de dolor y las personas que le rodeaban —en su mayoría periodistas— acudieron a socorrerle y avisaron a los servicios de emergencias.
El Ayuntamiento de Barcelona anunció que se personará en como acusación popular en este caso, que a su modo de ver supone el "episodio más negro" de la jornada del 1 de octubre.
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Siete de esas personas recibieron un pronóstico grave, siendo el de Roger Español el más destacado de los casos junto al de un hombre que sufrió un infarto durante una carga.
Por su parte, el Ministerio del Interior de España asegura que los sucesos del 1 de octubre dejaron contusionados a un total de 431 agentes, aunque sólo 40 recibieron atención médica.
