Aquel hecho histórico, que luego se denominaría "la matanza del Domingo Sangriento", contribuyó en gran medida a que en 1917 los bolcheviques, con Vladímir Lenin a la cabeza, tomaran el poder, con el fin de crear un Estado justo donde, entre otras cosas, sería imposible la desigualdad social y la explotación humana.
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Todo ello condujo a la aparición en el mapa mundial de la Unión Soviética, el primer Estado socialista del mundo, algo que para su fundador, Vladímir Lenin, fue solo el inicio del camino. Y es que soñaba con una revolución socialista mundial.
Para Miguel Manzanera Salavert, miembro de la dirección política del partido Izquierda Unida de España, la Revolución rusa fue "uno de los acontecimientos más importantes del siglo XX".
Entre otras cosas, porque "ha servido para que los pueblos y las clases trabajadoras consigan tener más fuerza y mejores condiciones de vida".
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Según el también Doctor en Filosofía, la Rusia soviética logró convertirse en un Estado "realmente autóctono" que fue el contrapeso al "imperialismo" occidental.
"La desaparición de la Unión Soviética" condujo "a la libertad absoluta del imperialismo y el capitalismo", señaló nuestro interlocutor, al afirmar que los "crímenes" que no deja de cometer la OTAN, en particular, en Oriente Medio, es consecuencia directa de ello.
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En este contexto, Miguel Manzanera Salavert se mostró convencido de que las políticas que está implementando el presidente ruso, Vladímir Putin, buscan arreglar el "desastre" que supuso el "hundimiento de la Unión Soviética".