"Ese señor no va a ser presidente de la República, dejemos de especular", dijo De la Calle en entrevista con la emisora local Caracol Radio.
El político agregó que una vez entre en funcionamiento la Justicia Especial para la Paz (JEP), el exguerrillero deberá comparecer ante ella y, si llega a ser condenado, deberá cumplir la sanción —como participar en la desactivación de minas antipersona— y no podrá ocuparse de otros asuntos.
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Sin embargo, destacó que las negociaciones de paz que se llevaron a cabo en La Habana, y que él lideró, no buscan sacar a los exguerrilleros de la escena política, sino que incursionen en ella tras ser debidamente juzgados.
"Un proceso de paz tiene un propósito, que se dejen las armas y hagan política, esa es la guía, además universal; no conozco un proceso exitoso que haya dejado atrás esa línea", señaló.
Esa posibilidad se habría barajado en la más reciente reunión del Consejo Político Nacional de la FARC, que continúa este martes, pero hasta el momento ni ese partido político ni ninguno de sus integrantes han confirmado la información.
